22 mayo 2008

Fulanito vive a la vuelta de mi casa. Debe tener, supongo, unos 18 años. Desde chiquito, yo que soy mas grande, siempre lo veía que iba al almacén de mi cuadra a hacer los mandados y siempre nos reíamos de cómo caminaba y meneaba esas bolsas feas horribles de plástico y colores mal combinados que usan las viejas, él era raro, siempre se manifestó medio rarito, hasta la forma de hablar. Un día fulanito fue a la iglesia de acá a la vuelta tenía unos diez años, iba a la iglesia porque estaba por tomar la comunión, y como ese día se iban a confesar por primera vez o a hacer un simulacro o ensayo o como mierda se llame de confesión, ese día fulanito fue bien bañado, peinado y perfumado; yo ese día lo vi, porque a mi mamá la invito la mamá de una pibita que iba con fulanito, y yo la acompañe asta las puertas de la iglesia. Fulanito se acercaba a la iglesia moviendo el culo como si fuese una minita, estaba con otras chicas y chicos pero el se diferenciaba bien, sus zapatos estaban bien lustrados y raya al medio prolijamente. Después de la comunión no fue mas a la iglesia porque se rumoreaba que el padre lo manoseaba y a el le gustaba.
La mamá de fulanito iba a la iglesia todos los domingos, porque estaba enferma, y a la noche se tomaba un güisqui a escondidas del marido. La hermana de fulanito cuando era chica escuchaba yuya, cuando le empezaron a crecer las tetas le gustaba la cumbia y cuando se canso escuchaba marilyn manson, ahora escucha Arjona y sabina. Una vez la hermana de fulanito me quiso apurar en la escuela porque, en realidad no se porque ni creo que haya tenido motivos, la cosa era que como ella es mucho mas grande que yo, yo le tenía miedo y en los recreos me escondía en el baño con una amiga tan o mas tonta que yo; asta que curse a primer año y me hice amiga de una gorda con olor a humedad en la ropa pero buena, que me defendía y no me molestó nunca mas nadie porque todos le tenían miedo a ella.
Fulanito era raro todos lo sabían menos la madre, creo, tal vez no lo quería asumir y se hacia la pelotuda. Un día me dijeron unos pibitos que jugaban a las bolitas en la vereda de mi abuela que no jugaban con fulanito porque se ponía las figuritas en el calzoncillo y las bolitas también; y otro fulanito vecino de fulanito 1, mas chiquito (todos sabemos que los fulanitos chiquitos no suelen mentir) dijo que un día a la tarde se subió arriba del techo de la casa para ir a buscar la pelo, y lo ve a fulanito que estaba en el patio, que se ponía leche en el pito y los gatitos se lo chupaban.
Actualmente fulanito se hace el emo, se pinta los ojos y las uñas e usa ropa fea muy fea, hace tres años atrás usaba remeras de pokemon, digimon y no se que otras mierdas, también juntaba etiquetas de cigarrillos y no sabía hablar.

No hay comentarios: